Tuve que resignar la razón para dar paso a la cópula.
Es así, querido amigo, como nosotros (post-modernos, post-adámicos y post-orgásmicos) retomamos a Kant.
La virtud de la mujer es ser como la loba, como la perra. ¿El hombre tiene virtud? (no se enoje caballero, sus pares me han hecho así, machista). Entonces resulta que después de mí, Tracy Lords hace el amor con el silencio y yo hago sexo y ruido. Pero el visitante, el extranjero, se come todas mis delicias, se traga todo mi punk-rock y se va a casa saciado, y luego pide más, pero no da nada.
Es así que me volví pelotuda y fácil, cien por ciento depilada, buscando el cambio. Pero el cambio no modifica. Sigo sintiendo la soledad aunque tenga la vagina más dilatada, claro, e incluso después de haber bebido tantos té de espermatozoide (mi té favorito). Después de todo, la soledad coge mejor. Sí, sí. Mejor que aquel cerdo que me decía: “sos anormal, no querés un orgasmo”, es decir, aquel cerdo que razonaba del modo “no comprendo; luego, ustedes son los idiotas”, es decir aquel cerdo que no podía darme con la pija lo que pretendía saciar con las manos, etcétera.
¡Tanta vida, señor!, ¿para qué tanta vida?. Para coger, Alejandra. Y entonces, la muchacha que antaño hallaba la máscara del infinito, se pone la líbido entre los labios y supura y depura en la única libertad libre, la que le es permitida. Coger y comprar no se reprime, no se sanciona. Y luego, soy una mujer que lleva detrás de sí el caudaloso río de la lujuria. ¡Tanta pija, señor!, ¿para qué tanta pija?.
"...esta mañana, a las ocho y cuarto, cuando salí del hotel Printania para ir a la biblioteca, quise levantar un papel que había en el suelo y no pude. eso es todo, y ni siquiera es un acontecimiento. sí, pero para decir toda la verdad, me impresionó profundamente: pensé que ya no era libre... "
sábado, 18 de diciembre de 2010
sábado, 30 de octubre de 2010
lunes, 18 de octubre de 2010
La muchacha y las sombras
Esa muchacha devuelta de sombras
señalada por las sombras
ensimismada entre las palabras y los espejos
esa muchacha tiene la herida más monumental
la más olímpica
la más desgarradora de todas las noches
y es el instante que olvida
y que vuelve
a la matriz progenitora,
a ese hombre que fue en su vida
su vida.
señalada por las sombras
ensimismada entre las palabras y los espejos
esa muchacha tiene la herida más monumental
la más olímpica
la más desgarradora de todas las noches
y es el instante que olvida
y que vuelve
a la matriz progenitora,
a ese hombre que fue en su vida
su vida.
martes, 7 de septiembre de 2010
La rebelión de los poetas malditos
En los albores de la virtud
sostengo
que la belleza es un vicio
y debe ser practicada sólo por los idiotas,
y moderadamente,
que cuando alguno de ustedes,
bellos e inhóspitos infrahumanos,
vaya a congraciarse frente al sabio
éste se arrancará los ojos
y supurará en sus mejillas
sostengo
que la belleza es un vicio
y debe ser practicada sólo por los idiotas,
y moderadamente,
que cuando alguno de ustedes,
bellos e inhóspitos infrahumanos,
vaya a congraciarse frente al sabio
éste se arrancará los ojos
y supurará en sus mejillas
lo advierto.
jueves, 12 de agosto de 2010
Al héroe que le faltaba la heroína que era amiga, cómplice y verdugo de Janis Joplin.
Esa necesidad patológica de insatisfacción
esa voz dañada por la palabra
el jardín supra-terrenal
la mirada hacia el abismo,
la hemorragia,
el verbo
ese andar verborrágico
y esa boca ralentizada,
sustituida
por las viejas huellas
que auguran el camino hacia lo infinito
damos un paso:
hay un héroe
y una voz
y una palabra escrita.
esa voz dañada por la palabra
el jardín supra-terrenal
la mirada hacia el abismo,
la hemorragia,
el verbo
ese andar verborrágico
y esa boca ralentizada,
sustituida
por las viejas huellas
que auguran el camino hacia lo infinito
damos un paso:
hay un héroe
y una voz
y una palabra escrita.
domingo, 8 de agosto de 2010
Y cuando es de noche
la luna se posa en su boca a conmemorar el cielo
se condensa en ella
el vacío de la ausencia
y la eternidad del llamado a lo infinito
si su boca se abre
un río de palabras desgarradas
obturarán el espacio
que el pájaro intentará demoler
con un solo soplido
los poetas están muertos,
y la muchacha alzará sus ojos
hasta el centro de sí
para alcanzar tal vez un espejo
un suicidio prematuro
o la oscuridad de su alma
quizás,
si la luna vuelve a posarse en su boca,
se destruya el cielo.
la luna se posa en su boca a conmemorar el cielo
se condensa en ella
el vacío de la ausencia
y la eternidad del llamado a lo infinito
si su boca se abre
un río de palabras desgarradas
obturarán el espacio
que el pájaro intentará demoler
con un solo soplido
los poetas están muertos,
y la muchacha alzará sus ojos
hasta el centro de sí
para alcanzar tal vez un espejo
un suicidio prematuro
o la oscuridad de su alma
quizás,
si la luna vuelve a posarse en su boca,
se destruya el cielo.
lunes, 2 de agosto de 2010
Nimiedades
Violento al violentarse por las delgadas pezuñas del sol
ese hombre no es un milagro
pero puede acaparar el cielo
y sin embargo ríe como los demás
como si le faltara risa
como si lo perezoso y lo sublime
pudieran coexistir
en algún más adentro
no puedo hacer del recuerdo
un manantial de lo infinito
pero sí puedo desnutrir a una flor
y ver cómo se deshoja.
ese hombre no es un milagro
pero puede acaparar el cielo
y sin embargo ríe como los demás
como si le faltara risa
como si lo perezoso y lo sublime
pudieran coexistir
en algún más adentro
no puedo hacer del recuerdo
un manantial de lo infinito
pero sí puedo desnutrir a una flor
y ver cómo se deshoja.
martes, 20 de julio de 2010
Preludio al vello que no está y garantía divina de que existe.
Tu corazón en carne que no hace falta desplumar,
pese y a causa de eso:
quiero
así,
como pequeños infantes,
violamos las normas,
las convenciones,
los cuerpos,
desenvainamos la piel,
nos adentramos en la ceniza
para sumergirnos en el polvo
el grito final,
el de la fiebre,
y un dramático silencio que no se calla.
pese y a causa de eso:
quiero
así,
como pequeños infantes,
violamos las normas,
las convenciones,
los cuerpos,
desenvainamos la piel,
nos adentramos en la ceniza
para sumergirnos en el polvo
el grito final,
el de la fiebre,
y un dramático silencio que no se calla.
viernes, 16 de julio de 2010
Ese amor delgado y apasionante
de los fragmentos en prosa
y las ruinas en verso
ese amor de antaño
de hoy
de siempre
ese amor infinito
inconexo
inefable
todas las palabras son ese amor
todo el amor son esas palabras
y verbos
y adjetivos
y adverbios
te quiero - dijo la loba
y la poesía se quitó el manto de la soledad
de los fragmentos en prosa
y las ruinas en verso
ese amor de antaño
de hoy
de siempre
ese amor infinito
inconexo
inefable
todas las palabras son ese amor
todo el amor son esas palabras
y verbos
y adjetivos
y adverbios
te quiero - dijo la loba
y la poesía se quitó el manto de la soledad
martes, 13 de julio de 2010
martes, 6 de julio de 2010
Cuando perdió su segunda virginidad,
la muchacha sangró más que en la primera;
¿qué queremos decir?
que la muchacha estaba estupefacta y fría
cuando el hombre-de-atrás
gemía ininterrumpidamente
no es esto todo:
la muchacha era insertada en todos sus orificios
mientras pensaba que sus uñas
estaban demasiado largas para masturbarse
no es esto todo:
el hombre-de-atrás estaba envestido
de un látex-super-orgasmo
que lo hacía aún mucho más superficial
esto no es todo:
la muchacha realiza un estridente la 440
y, convertida en una excelente actriz,
realza su vuelo al infinito
el hombre-de-atrás, de-adelante y del-centro,
en vísperas de abrir las puertas del paraíso,
se glorifica: soy un buen polvo.
la muchacha sangró más que en la primera;
¿qué queremos decir?
que la muchacha estaba estupefacta y fría
cuando el hombre-de-atrás
gemía ininterrumpidamente
no es esto todo:
la muchacha era insertada en todos sus orificios
mientras pensaba que sus uñas
estaban demasiado largas para masturbarse
no es esto todo:
el hombre-de-atrás estaba envestido
de un látex-super-orgasmo
que lo hacía aún mucho más superficial
esto no es todo:
la muchacha realiza un estridente la 440
y, convertida en una excelente actriz,
realza su vuelo al infinito
el hombre-de-atrás, de-adelante y del-centro,
en vísperas de abrir las puertas del paraíso,
se glorifica: soy un buen polvo.
miércoles, 30 de junio de 2010
la muchacha abraza la noche
de mi celo impotente
y goza de mí
y ríe de mí
y masturba de mí
es el reflejo de todo lo abierto
y yo lo cerrado
soy sobre ella
para ella
contra ella
esa mujer
es la delgada pezuña de un animal
y yo soy el animal
sin palabras para abastecer las acciones
sin armas para llenar el círculo siempre infinito.
(el hombre superlativo)
de mi celo impotente
y goza de mí
y ríe de mí
y masturba de mí
es el reflejo de todo lo abierto
y yo lo cerrado
soy sobre ella
para ella
contra ella
esa mujer
es la delgada pezuña de un animal
y yo soy el animal
sin palabras para abastecer las acciones
sin armas para llenar el círculo siempre infinito.
(el hombre superlativo)
lunes, 28 de junio de 2010
la hija putativa del viento
cuando la nube se abra a reverenciar al sol
se tratará de poner, y no sacar
abrir, y no cerrar
decir, y no hablar
entonces
será el momento de la putrefacción de la carne
y el instante infinito
de entornar
los ojos hacia el cielo.
se tratará de poner, y no sacar
abrir, y no cerrar
decir, y no hablar
entonces
será el momento de la putrefacción de la carne
y el instante infinito
de entornar
los ojos hacia el cielo.
sábado, 19 de junio de 2010
Yo resueno en el silencio
porque soy el ruido
yo agonizo en las hojas de los árboles,
y en las hojas,
y en los árboles
porque soy un constante gemir
de un latido que se entrega anacrónicamente
porque en la verdad
yo he escrito tu nombre
y en el muro
encontré el fundamento para mis delirios
yo agonizo en las hojas de los árboles
y de los libros
y entre mis palabras
y soy la fiebre
y la hora y el reloj
y el tiempo
porque cuando digo las palabras
no digo: las palabras,
digo, además,
que estoy herida.
porque soy el ruido
yo agonizo en las hojas de los árboles,
y en las hojas,
y en los árboles
porque soy un constante gemir
de un latido que se entrega anacrónicamente
porque en la verdad
yo he escrito tu nombre
y en el muro
encontré el fundamento para mis delirios
yo agonizo en las hojas de los árboles
y de los libros
y entre mis palabras
y soy la fiebre
y la hora y el reloj
y el tiempo
porque cuando digo las palabras
no digo: las palabras,
digo, además,
que estoy herida.
sábado, 1 de mayo de 2010
Vivir es lascivia.
De entrepierna en entrepierna,
eternamente mojada,
eternamente sorprendida
por la impotencia del lenguaje
Primer acto: un hombre tamaño natural entra a una habitación y dice: ¡chupa hasta agotar stock!. La muchacha, compuesto de miseria y loba, abre su boca como para que entren el hombre iracundo y además la cama y la mesita de luz. Fiebre peniana. Impunidad vaginal.
Segundo acto: el hombre de exceso fálico se entrega al sexo famélico. La sa-cie-dad es una mentira para las chiquitas. Ese obelisco insatisfecho crece, crece, pero jamás se hace pequeño. Entonces, la pija superlativa clama amor a la loba, a quien el exceso le parece un defecto y deja la cama vacía con olor a mojigata en celo (tan gata como moji) y se hace humo como un cigarrillo (con-un-cigarrillo, que el honorable superdotado cede pese –y a causa de– el abandono).
Tercer acto: la zorra virginal (antaño) dispone ahora de una pija precoz. Si antes el exceso le parecía un defecto, ahora el defecto le parece excesivo. Se habla el mismo lenguaje, sólo que las palabras padecen la esterilidad de lo inconcluso. Chu.. m... pi.. T.. quie.. mu…
El sexo es un telón siempre abierto,
siempre en escena.
En cierto modo, la muchacha animal (loba/gata/zorra) es un agujero intransitable porque es infinito. Se ingresa en ella y ella te chupa hasta el límite de lo ajeno. Y entonces, uno se sienta a tomar el té con un-otro-que-yo (con unos-cuantos-otros-que-yo) que conviven adentro de la muchacha y esperan que cuando ella acabe puedan volver a la superficie.
De entrepierna en entrepierna,
eternamente mojada,
eternamente sorprendida
por la impotencia del lenguaje
Primer acto: un hombre tamaño natural entra a una habitación y dice: ¡chupa hasta agotar stock!. La muchacha, compuesto de miseria y loba, abre su boca como para que entren el hombre iracundo y además la cama y la mesita de luz. Fiebre peniana. Impunidad vaginal.
Segundo acto: el hombre de exceso fálico se entrega al sexo famélico. La sa-cie-dad es una mentira para las chiquitas. Ese obelisco insatisfecho crece, crece, pero jamás se hace pequeño. Entonces, la pija superlativa clama amor a la loba, a quien el exceso le parece un defecto y deja la cama vacía con olor a mojigata en celo (tan gata como moji) y se hace humo como un cigarrillo (con-un-cigarrillo, que el honorable superdotado cede pese –y a causa de– el abandono).
Tercer acto: la zorra virginal (antaño) dispone ahora de una pija precoz. Si antes el exceso le parecía un defecto, ahora el defecto le parece excesivo. Se habla el mismo lenguaje, sólo que las palabras padecen la esterilidad de lo inconcluso. Chu.. m... pi.. T.. quie.. mu…
El sexo es un telón siempre abierto,
siempre en escena.
En cierto modo, la muchacha animal (loba/gata/zorra) es un agujero intransitable porque es infinito. Se ingresa en ella y ella te chupa hasta el límite de lo ajeno. Y entonces, uno se sienta a tomar el té con un-otro-que-yo (con unos-cuantos-otros-que-yo) que conviven adentro de la muchacha y esperan que cuando ella acabe puedan volver a la superficie.
miércoles, 14 de abril de 2010
Esa espera de luces tibias,
negras,
el odio de los soles,
la arrogancia de los soles,
la circunferencia de los soles,
el concepto de infinito,
muerto,
en la tempestad de las palabras,
esa espera es la hemorragia de una sombra desgastada,
fría,
impotente,
sin manos para acariciar las rodillas
sin voces para proyectar el encanto
sin palabras para decir lo que se esconde
en el lenguaje del silencio
negras,
el odio de los soles,
la arrogancia de los soles,
la circunferencia de los soles,
el concepto de infinito,
muerto,
en la tempestad de las palabras,
esa espera es la hemorragia de una sombra desgastada,
fría,
impotente,
sin manos para acariciar las rodillas
sin voces para proyectar el encanto
sin palabras para decir lo que se esconde
en el lenguaje del silencio
sábado, 27 de febrero de 2010
sábado, 13 de febrero de 2010
me duele la inteligencia
en la boca de los otros
con forma de presunción
como una espada
o un ritual escandaloso
que me hace la corte
pero margina
como si yo fuera una simple espectadora
de la mente del mundo
como si el mundo fuera un simple espectador
de la mente del yo
una palabra antisocial
un gesto antisocial
una autoridad antisocial.
yo. yo. yo.
en la boca de los otros
con forma de presunción
como una espada
o un ritual escandaloso
que me hace la corte
pero margina
como si yo fuera una simple espectadora
de la mente del mundo
como si el mundo fuera un simple espectador
de la mente del yo
una palabra antisocial
un gesto antisocial
una autoridad antisocial.
yo. yo. yo.
viernes, 1 de enero de 2010
Decís una palabra
pero describís el mundo
como si un ángel
o una alucinación
cayeran desde lo ajeno
el espectro reticular
pero concluyente
reacciona
o vuelve a accionar
la malsana elocuencia
y te abrís
a la hemorragia gramatical
para seducirme
para ultrajarme
con el verbo que no puedo
y el fonema que me falta
hágase la magia para la mortal insurrecta
que inmediato volverá a florecer la noche
pero describís el mundo
como si un ángel
o una alucinación
cayeran desde lo ajeno
el espectro reticular
pero concluyente
reacciona
o vuelve a accionar
la malsana elocuencia
y te abrís
a la hemorragia gramatical
para seducirme
para ultrajarme
con el verbo que no puedo
y el fonema que me falta
hágase la magia para la mortal insurrecta
que inmediato volverá a florecer la noche
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